Historia de un grabador vocacional

Por Tomás Álvarez

Periodista y escritor cepedano.

José Holguera (León 1965) es un tipo con aire intemporal y despistado. Las más de las veces recibe al visitante cubierto con un batín azulón, con más aspecto de operario de un taller de artes gráficas del siglo XIX que de trabajador/dependiente del siglo XX. Como leonés, es más bien serio y cáustico; más propicio a escuchar que a dar explicaciones. Su tienda-taller está casi escondida, como si el grabador despreciase las técnicas modernas de marketing y comunicación. No hay rótulos, sólo una gran cristalera en la que expone algunos de sus grabados; muchos con temas leoneses, pero otros muchos con asuntos relativos al camino santiagueño. Porque desde hace años, Holguera viene trabajando en una gran serie de planchas sobre el Camino de Santiago; este año ha editado y las carpetas correspondientes a Navarra y La Rioja.

Iglesias, palacios, arquitectura popular y paisajes quedan reflejados en esta magna recopilación, cuya realización siempre está precedida de un detenido recorrido de los lugares en los que el grabador quiere hallar – según sus propias palabras – “el alma del Camino”.
En mayo pasado abrió la serie de reproducciones con la carpeta dedicada a Navarra, en la que incluye imágenes desde Saint Jean Pied de Port, en la vertiente de los Pirineos, a Viana, ya cerca del Ebro. Ahora en octubre, José Holguera acaba de editar la carpeta dedicada a La Rioja. Tras la finalización de su carpeta riojana, el grabador ha emprendido de nuevo la ruta por los caminos de Burgos, para empaparse de monumentos y lugares jacobeos.

El grabador Holguera siempre amó el dibujo. A los siete años le dieron su primer diploma en el concurso de dibujo de su colegio. Ya muy joven comenzó a trabajar en una planta química, pero simultaneó su actividad laboral con estudios de Delineación e Ingeniería. Guiado por su amor a la expresión pictórica, trabajó primero la pintura (carbonillo, óleo y pastel) pero posteriormente acabó centrándose en el grabado, para lo cual instaló su propio taller en el casco antiguo de la ciudad de León. Durante cierto tiempo realizó numerosas obras que no comercializó, hasta que el propietario de una galería de arte salmantina (Arte Miranda), tras descubrir sus trabajos, le hizo un amplio pedido conjunto. Desde entonces, sus obras se han comercializado y él dejó de lado su trabajo en la factoría química para centrarse en su vocación artística. En la actualidad se dedica sólo al grabado, con labores en aguafuerte, aguatinta, punta seca; trabajos que son admirados por quienes pasan ante el escaparate de su taller, ubicado en la calle Puerta Moneda, al lado de la iglesia románica del Mercado, lugar por el que indefectiblemente caminan los peregrinos que avanzan a Santiago de Compostela. Muchos de estos caminantes tienen un acusado sentido artístico, y aprovechan la visita al taller para adquirir algún grabado que les genera emoción particular: Roncesvalles, el puente de Zubiri, el Alto del Perdón, Puente La Reina, Santa María de Nájera… En esta “marea” jacobea llegan gentes de todas las profesiones. Por ello, por su taller han pasado desde directivos del MOMA de Nueva York a descendientes de Pablo Picasso, que dejan signado su paso en un libro de firmas que tiene abierto para los viajeros. Tal vez por este trato con los caminantes e incluso por su afición peregrina, José Holguera se ha ido centrando cada vez más en el Camino, que poco a poco va eternizando en sus grabados. Toda la obra está realizada a mano, tanto el grabado (Aguafuerte y Aguatinta) como la estampación, realizada en un tórculo, siguiendo modelos calcográficos del siglo XVI, afirma Holguera. La carpeta de Navarra incluye once páginas, con 38 planchas (16 de cobre, 15 de zinc y 7 sellos secos); la de La Rioja, siete páginas con 31 planchas (6 de cobre, 18 de zinc y 7 sellos secos). “No tengo prisa por terminar la serie jacobea – dice el grabador- tal vez tarde 5 años en hacer la obra completa”, dice este admirador de la obra de grandes artistas como Francisco de Goya o Giovanni Battista Piranesi. De momento, para ir financiando su obra, Holguera comercializa ya algunas páginas, reservando también otras para quienes quieran tener la carpeta entera de cada territorio, e incluso para quienes se interesen por todo el Camino.

Holguera trabaja en una gran serie de planchas en las que quiere hallar “el alma del Camino”.

 


Actualmente el grabador ha finalizado el Camino y la obra ha sido completada, fue acogida por el Cabildo Catedralicio de León con una muestra presentada  en la sala de exposiciones de la diócesis de León, Palat del Rey, Iglesia románica del siglo X.

León 2018

Opiniones

El maestro José Holguera hace de la sencillez virtud en cada trazo que primero dibuja, luego graba con el buril, para que los ácidos trabajen en sus planchas y, de ahí, prueba y prueba en el estampado hasta alcanzar la perfección y belleza en sus obras. Para mí es un referente de trabajo bien hecho y de hombre de bien. Mucho recomiendo conocer su trabajo y su persona.

Román Blanco Reinosa, Ingeniero de Caminos.

He desarrollado con José Holguera el proyecto Un bosque de azules pendientes y ha sido un enorme placer trabajar con alguien que ha sabido traducir desde el primer momento mis textos en unos magníficos grabados. Un completo acierto trabajar juntos.

José María Alonso, Abogado, escritor y fotógrafo leonés. (proyecto: “Un bosque de azules penitentes”)

José Holguera, genial artista del grabado artístico, permite que pasées por las salas de estas colecciones de arte sacro sin necesidad de desplazarte. Nos envía una nueva visión de inspiración y gozo.

Máximo Gómez Rascón. Director de Patrimonio de la Diócesis de León.

José Holguera García es un extraordinario maestro grabador. Su creatividad y talento tienen testimonio en las composiciones que elabora con paciencia benedictina y que, luego, los tórculos traducen en estampas deslumbrantes. Por iniciativa suya, en febrero 2016, en la iglesia de Palat del Rey, espacio expositivo de la Diócesis de León, unos textos de mi autoría dieron cobertura indicativa a su excelente muestra “La Pulchra” en el Camino de Santiago, tan singular como interesante. Esta colaboración representó para mí una aventura aleccionadora. Así lo sentí entonces y así lo siento ahora.

Máximo Cayón Diéguez. Cronista Oficial de la ciudad de León.

José Holguera es una de las pocas personas que ha estado por los lugares, caminos y parajes por dónde Rocinante pisó. Después de grabar el Camino de Santiago, su inquieto buril, siempre bien afilado, quiere dejarnos su interpretación del maravilloso cuento de Cervantes, Realidad, ficción y abstracción de las aventuras del Caballero de la Triste Figura de un gran dibujante y grabador leonés, para el que he servido de lazarillo por la Mancha de Don Quijote.

Luis Miguel Román Alhambra. Escritor y articulista cervantino. Presidente de la Sociedad Cervantina de Alcázar de San Juan.

Hay accidentes en tu vida, que no buscas, pero te suceden y cambian tu percepción de la vida. A mí, ese accidente se llama José Holguera. Rodeado de “qué más da” encontrar una persona que busca la perfección, creando imágenes con amor y repartiendo sabiduría con la humildad del que sabe.

Javier Puente Grande. Abad de La Cofradía de Minerva y Veracruz (León 1612), para el bienio 2012-2013.